El agresor ya cometió un hecho similar hace unos meses en la capital aragonesa. La Policía le imputa también varios delitos de lesiones.
La Policía Nacional detuvo a primera de este miércoles al hombre que hace unos días escupió y golpeó a tres chicas que caminaban por el barrio de Las Delicias de Zaragoza. Los hechos se produjeron sobre las 9.00 del pasado miércoles, 12 de marzo, en la confluencia del paseo de Calanda con la avenida de Madrid. Las víctimas paseaban tranquilamente por la calle cuando de forma sorpresiva y sin mediar palabra un hombre se dirigió hacia ellas, les escupió y golpeó hasta que ayudadas por varias personas lograron que depusiera su actitud.
De inmediato, una patrulla de Policía Nacional acudió al requerimiento de las jóvenes y pudo identificar al presunto autor de la agresión, que todavía se encontraba en el lugar. En un primer momento, las lesiones mostradas por las víctimas no parecían ser constitutivas de delito, por lo que la patrulla identificó a las partes, informó sobre los trámites a seguir y se dirigió hasta la comisaría de Distrito Delicias para prestar comparecencia.
El Grupo de Policía Judicial de la Comisaria de Delicias se hizo cargo de la investigación y pudo comprobar que no se trataba de un hecho aislado, ya que el presunto autor había protagonizado un hecho similar meses atrás, por el que tenía un procedimiento judicial abierto.
El detenido ha mostrado odio hacia las mujeres
Para los agentes encargados de la investigación, fue relevante la reiteración en el hecho delictivo de la misma naturaleza para poderle imputar un delito de odio, ya que el único fundamento para cometer las agresiones, tanto la de la semana pasada como la de hace unos meses, fue el odio hacia las mujeres.
De esta manera, dice la Jefatura Superior de Aragón, «queda reflejado el compromiso de la Policía Nacional con la sociedad y su tolerancia cero hacia delitos enfocados a colectivos vulnerables».
Por otra parte, una de las víctimas de la agresión aportó en su denuncia un parte facultativo en el que constaba la rotura de una falange en uno de sus dedos, por lo que además del delito de odio y trato degradante, se le imputaba también el de lesiones.
Durante la mañana de este jueves, el detenido ha sido conducido hasta el juzgado de instrucción en funciones de guardia, donde será oído en declaración como presunto autor de dos delitos leves de lesiones, un delito de lesiones, un delito de odio y otro contra la integridad moral.